SOBRE SOS10

Cuando vino al mundo mi primera hija (con aquellos enormes ojos que no dejaban de mirarme) comenzó una aventura que no ha dejado de crecer y que nos cambió la manera de ver el mundo para siempre, una aventura que nos es muy familiar a millones de mujeres: La de ser madre. ¡Ser mamá!, Cuántos instantes llenos de amor y ternura que mitigan las noches sin dormir y los días sin descanso. Repetí experiencia y a los cuatro años nació mi hijo, llegó al mundo con 4,800Kg, ¡Qué momentazo cuando lo ví! parecía el hermano mayor de todos los demás bebés .Tan sólo 16 meses después llegó la peque de la casa, una preciosa niña que no ha dejado de sonreír.

Ser padres, habrá muchas experiencias en el mundo dignas de ser vividas,

Ésta es la más increible 

Pero…en este camino dejamos pertenencias difíciles de recuperar de manera natural, otras mediante intervención quirúrgica tienen solución. El pecho, creo que llegados a este punto todas estamos de acuerdo en que después de ser madre nunca volverá a su sitio no obstante yo no quería renunciar a los escotes que tanto me gustan, barajé la posibilidad de las prótesis pero después de tres cesáreas le tenía cierto respeto al quirófano. Además le di muchas vueltas a los riesgos de la intervención tanto a corto como a largo plazo. Por último, los resultados, generalmente, me parecen poco naturales. Con todo esto descarté la solución mediante intervención. Comencé a buscar soluciones y a experimentar con ellas. De aquel problema nació sujetador adhesivo que ha hecho que me sienta más segura, más cómoda y más sensual. Todas mis amigas fueron mis primeras usuarias y todas quedaban encantadas con el efecto conseguido así que me lancé. Por eso pensé… ¡Es el momento de compartirlo!. ¡Pruébalo!